Alrededor del mundo, las personas se
han adaptado al ambiente en el que se encuentran y se han establecido por medio
de la explotación de recursos y distintas actividades que ha permitido la subsistencia
del ser humano de acuerdo a las condiciones climáticas y ambientales en
diferentes paisajes geográficos.
En
las montañas, el ser humano ha llevado una vida diferente debido a la
irregularidad del paisaje y además, de las altitudes que allí se presentan. Las
personas que habitan en las montañas, se adaptan a las condiciones de escasez
de oxígeno que es característico y por consiguiente, las personas se adaptan
corporalmente para poder vivir bajo estas circunstancias. Otro aspecto es que
la comunicación es, prácticamente, obstaculizada por las características que
poseen este tipo de paisaje geográfico. En esta forma de vida, la actividad
agrícola es poca debido a la infertilidad de sus suelos, mientras que la
ganadería ha sido una de las actividades económicas más importantes y
requeridas en estas zonas. Por lo tanto, la vida en las montañas es un poco
difícil pero con aspectos indispensables a los cuales la única manera de
habitar allí es por medio de la adaptación.
En las zonas bajas llamadas valles y
llanuras, la población se concentra aún más y por ende las actividades
económicas que desarrolla el ser humano son mayores que en otras partes del
mundo debido a muchos factores como el suelo, el clima, las temperaturas, entre
otros. Sin duda alguna, en estos sitios del planeta la industrialización ha
crecido cada vez más, lo que genera más empleo y una forma de vida más
“moderna” o que se encuentra más actualizada con lo que exigen las grandes
ciudades importantes en los últimos años. Por lo que, el traslado de las
personas de zonas en las cuales el estilo de vida se dificulta a zonas como
estas, ha aumentado ya que el ser humano busca siempre su satisfacción y el
vivir con comodidad.
Está el caso de las costas que se
reconocen por estar cercanas al mar, y que fueron los primeros asentamientos
del ser humano para descubrir otras tierras en siglos pasados. En algunas de
ellas, se perciben yacimientos de minerales que han permanecido allí, también
poca fauna y flora, pero sobretodo, las personas que habitan en este paisaje
geográfico han tenido que sobrevivir por medio de actividades como la pesca,
que es considerada una de las más significativas de estos lugares. Otro aspecto
es que la base de su alimentación proviene de allí, por lo que en su dieta se
incluyen toda clase de mariscos y pescado. Las costas no han tenido gran
influencia del ser humano, en cuanto al asentamiento de población, sino más que
todo se han convertido desde siempre en un paisaje apto para actividades de
entretenimiento y también su clima tan cálido.
Existen otro tipo de paisajes que
son los desiertos y éstos se han reconocido por las altas temperaturas que
poseen, debido a la escasa influencia de vientos alisios y más que todo, por la
ubicación en el mundo. En estas zonas no hay mucha población, porque sus
características no han permitido una fácil manera de vivir allí, pero existe al
menos fauna y flora que están condicionados a esa clase de clima. Una de las
actividades reflejadas en estas zonas, es el arado de distintos productos que
cubren la alimentación de muchas personas que habitan bajo esas formas.
Por lo tanto, cada sitio en nuestro
planeta posee sus propias características y condiciones que provoca la
adaptación del ser humano, ya que en cada uno de ellos existen muchas maneras
de subsistir.